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António Guterres destaca que las Naciones Unidas no abandonarán al pueblo sudanés, defiende el multilateralismo y recuerda que su Carta fundacional contribuyó a evitar una tercera guerra mundial. La Asamblea General analiza cómo lograr un sistema que equilibre las necesidades económicas, sociales y medioambientales. Comienza la Semana de la Vacunación.
Tras el inicio de enfrentamientos entre fuerzas sudanesas el pasado 15 de abril, el Secretario General de la ONU declaró este lunes que la violencia en la nación africana “debe cesar”, ya que se corre el riesgo “de una conflagración catastrófica dentro de Sudán que podría afectar a toda la región e incluso a otras zonas”.
En una sesión del Consejo de Seguridad dedicada al mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, António Guterres condenó enérgicamente el bombardeo indiscriminado de zonas civiles y llamó a las partes enfrentadas a detener las operaciones de combate en zonas densamente pobladas y permitir las operaciones de ayuda humanitaria.
El titular de la ONU indicó que la Organización está reorganizando su presencia en la nación africana y que, por ello, autorizó la reubicación temporal de parte del personal de las Naciones Unidas y de sus familias, tanto dentro como fuera del país.
“Permítanme ser claro: las Naciones Unidas no van a abandonar Sudán. Nuestro compromiso es con el pueblo sudanés, en apoyo de sus deseos de un futuro pacífico y seguro. Estamos con ellos en estos terribles momentos”, declaró.
Las Naciones Unidas trasladaron temporalmente a parte de sus trabajadores a la localidad costera de Port Sudan donde serán evacuados a países vecinos. El personal de la ONU trabajará a distancia, como medida para minimizar los riesgos de seguridad de su personal, sin dejar de prestar asistencia a la población sudanesa.
Un pequeño número de personal contratado internacionalmente, incluido el representante especial del Secretario General, Volker Perthes, permanecerá en Sudán y seguirá trabajando para resolver la crisis actual y reemprender las tareas encomendadas a la ONU.
A continuación, António Guterres hizo un encendido elogio del multilateralismo y señaló que la unión de ese sistema solidario cosechó algunos éxitos notables durante los últimos 78 años.
“Los instrumentos y mecanismos establecidos por la Carta han contribuido a evitar una tercera guerra mundial. El establecimiento de la paz y la diplomacia preventiva de las Naciones Unidas han contribuido a poner fin a conflictos en todo el mundo”, rememoró.
A esos logros, Guterres añadió los avances en el ámbito económico y social, la reducción de la pobreza y el hambre, la erradicación de las enfermedades y el reconocimiento y el respeto de los derechos humanos.
Pese a todos estos avances, que no se habrían producido sin la cooperación entre países, señaló que el sistema multilateral está sometido a mayores tensiones que en ningún otro momento desde la creación de las Naciones Unidas.
“Se necesitan urgentemente respuestas multilaterales eficaces para prevenir y resolver conflictos, gestionar la incertidumbre económica, salvar los Objetivos de Desarrollo Sostenible y abordar los desafíos a las normas mundiales contra el uso y la posesión de armas nucleares”.
Guterres afirmó que los retos globales sólo pueden solucionarse “mediante el respeto del derecho internacional, la adhesión a los compromisos globales y la adopción de marcos adecuados de gobernanza multilateral”.
Pese a que la humanidad forma parte de la naturaleza seguimos despreciando su salud y sostenibilidad, centrándonos en extraer sus recursos para satisfacer las necesidades inmediatas de una o dos generaciones de seres humanos, afirmó hoy el presidente de la Asamblea General de la ONU durante un diálogo con los Estados miembros sobre la armonía con la naturaleza.
“Nuestro planteamiento se ha basado en creer que los recursos son infinitos y que el crecimiento del consumo siempre es bueno. En ver siempre el crecimiento como pura ganancia. En engañarnos pensando que todo lo que nos ofrece la Tierra es gratuito, libre de responsabilidades que asumir”, destacó.
Por ello, Csaba Kőrösi señaló que llegó la hora de reconocer que el crecimiento infinito de la llamada economía lineal no es posible en un mundo de recursos finitos.
En consecuencia, destacó la necesidad de impulsar un sistema basado en la “Armonía con la Naturaleza” que aspire a lograr un justo equilibrio entre las necesidades económicas, sociales y medioambientales de las generaciones presentes y futuras.
Para cuantificar los progresos en materia de sostenibilidad, Kőrösi sostuvo la necesidad ir más allá de las mediciones basadas en el Producto Interior Bruto y abogó por la creación “de un sistema de medición que lo incluya todo, desde cuando talamos un árbol hasta cuando damos los últimos retoques a una casa nueva”.
La Organización Mundial de la Salud comenzó este lunes la semana Mundial de la vacunación que este año se celebra del 23 al 30 de abril.
La iniciativa busca destacar la importancia de emprender acciones colectivas para proteger a la población de las enfermedades prevenibles mediante la vacunación.
La agencia de la ONU destacó la necesidad de actuar de inmediato y vacunar a los millones de niños que no fueron inmunizados durante la pandemia, restablecer la cobertura de vacunación básica al menos a los niveles de 2019 y reforzar los sistemas de atención primaria de salud para que puedan administrar las vacunas necesarias.
Al menos 25 millones de niños solo recibieron una dosis de vacunación durante 2021, y 18 millones no recibieron ninguna. Es necesario actuar especialmente en los 20 países de ingresos bajos y medios donde viven más de tres cuartas partes de los niños que no recibieron vacunas.
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